Procesos del café

Tras despulpar las cerezas, los granos fermentan en agua para eliminar el mucilago, se lavan y se secan cuidadosamente. Esto produce tazas claras, con acidez vibrante y notas que reflejan el terroir y la variedad. Clave en el café de especialidad por resaltar sabores limpios y brillantes.

Las cerezas de café se despulpan, pero parte del mucilago se deja en el grano durante el secado. Esto aporta dulzura, cuerpo sedoso y notas frutales intensas, ideales para cafés de especialidad. Equilibra la limpieza del lavado y la complejidad del natural.

Las cerezas se secan enteras al sol, permitiendo que el grano absorba los azúcares de la pulpa. Esto produce perfiles intensos con notas dulces, frutales y exóticas, creando especialidad única en el café. Es el más antiguo y destaca por su complejidad y cuerpo.